La izquierda indeseable
La izquierda indeseable es aquella
que predica ideas que sabe falsas entre personas que sabe idiotas; la que manda
al diablo a las instituciones de la República; la que pretende gobernar con
recetas sacadas del bote de la basura de la historia; la que se dice
progresista y rechaza las reformas estructurales.
Francisco Martín
Moreno
La
que pretende probar irregularidades electorales con animales de granja y
tarjetas falsas; la que exige aumentos salariales de emergencia, cierra las
fronteras e impone precios oficiales para destruir la economía, el comercio, el
campo y la industria; la que regala un pescado en lugar de enseñar a pescar; la
que organiza marchas callejeras de extracción fascista para impresionar y
presionar a la autoridad y a la nación; la que sabe que en un país de “machos”
el hecho de desafiar a la autoridad reporta enormes dividendos políticos; la
que divide al pueblo entre ricos y pobres y estimula el incendio de la nación
para luego traicionarla al no poder cumplir sus promesas.
La
que tiene su propio encuestador que exprese su propia verdad; la que financia
presupuestos públicos imprimiendo dinero fresco y se endeuda para no lastimar a
la nación con incrementos tributarios; la que profesa una idolatría
cuasi-religiosa especialmente eficaz en la manipulación de muchedumbres; la que
nombra a un “Papá” político para construir un temerario autoritarismo; la que
controla a las masas con emociones y no con argumentos; la que sabotea la
operación del Poder Legislativo para evitar la promulgación de disposiciones
contrarias a los intereses del pueblo, o sea, los suyos propios; la que toma la
tribuna o impide los accesos de los representantes populares a sus respectivas
cámaras para que no voten leyes que atenten en contra de sus objetivos
políticos.
La
que llama “pirruris” a quienes protestan por el secuestro, mutilación y muerte
de los suyos; la que ataca a la prensa en forma abierta o encubierta cuando
ésta exhibe sus dobleces y falsedades; la que esconde en sospechosos
fideicomisos la corrupción de su gestión; la que propone que si diez roban a
uno por el solo hecho de ser más les asiste la razón; la que para alcanzar sus
metas políticas sugiere la adopción del papel de víctimas políticas a sus
líderes para lucrar con el sentimiento de piedad del pueblo; la que lucra a
toda costa con el hambre, la esperanza y la ignorancia de los desposeídos
abusando de su ignorancia.
La
que sabe que Lula fue un gran líder de izquierda y que rescató en 8 años a 28
millones de brasileños de la miseria y, sin embargo, no lo imita ni sigue su
ejemplo; la que reverencia a Chávez y a Castro y homenajea a sátrapas como Kim
Jong, de Corea del Norte; la que pretende evadir la ley con discursos airados
en las plazas públicas; la que etiqueta como traidores, hambreadores y
vendepatrias a quienes se opongan a sus políticas expropiatorias; la que se
apoya en sindicatos oficiales, auténticas pandillas de líderes venales, como el
SME, aunque tengan secuestrado al país; la que niega las reglas del mercado por
oponerse éstas a las necesidades del pueblo.
La
que entiende que a más
hambre y miseria, mayores facilidades de manipulación populista;
la que acusa sin pruebas; la que propone que “primero los pobres”, porque serán
los primeros en ser pasados a cuchillo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario